Entre las provincias de Lugo y Ourense se encuentra el tramo final del río Sil. En estos 35km. se levantan paredes, en algunos casos de hasta 500m en vertical sobre sus aguas. Estas laderas forman los meandros que convierten en una de las zonas más bonitas de Galicia. Además de ser el sustento de los habitantes de la zona, este paraje también es refugio de animales y vegetales por sus particulares condiciones.
Para conocer el entorno es recomendable realizar alguna de las rutas de senderismo que recorren los cañones del Sil, visitar las bodegas de los vinos D.O. Ribeira Sacra o cambiar de perspectiva haciendo un viaje en catamarán por el río Sil.